¿Mercado laboral o inflación: qué es más importante para la Fed?

La Reserva Federal toma una decisión clave

EUR/JPY

Zona clave: 176.50 - 177.50

Compra: 178.00 (con una base fundamental muy positiva) ; objetivo 179.50-180.00; StopLoss 177.50

Venta: 176.00 (en retroceso tras la corrección hasta 176,80) ; objetivo 174.50; StopLoss 176.50

La política monetaria es un equilibrio constante — una elección entre la estabilidad a corto plazo y los riesgos a largo plazo.

La tarea de la Reserva Federal es controlar la inflación y garantizar el máximo empleo; hoy, ambos objetivos de este doble mandato avanzan en direcciones opuestas. Por ejemplo, todo lo que estimula la demanda beneficia al mercado laboral, pero esas mismas medidas hacen subir los precios.

Hoy, la Fed debería reducir la tasa de fondos federales en 25 puntos básicos — la segunda vez en 2025. El objetivo es claro: apoyar un mercado laboral que está perdiendo impulso.

La reducción de la tasa estimulará el gasto antes de la temporada de compras festivas, aumentará la actividad del consumidor y permitirá a las empresas trasladar parte de los costos de los nuevos aranceles a los consumidores.

Sin embargo, el lado negativo de esta estrategia es evidente: el crédito barato acelera la inflación. Si la tasa permanece alta, las empresas serán más cautelosas al contratar y el crecimiento del empleo se ralentizará.

Según Bloomberg, las solicitudes iniciales de subsidio de desempleo para la semana que terminó el 11 de octubre cayeron a 215.000, frente a las 234.000 de la semana anterior — un alivio temporal en medio de la turbulencia.

El cierre parcial del gobierno dificulta la publicación de estadísticas oficiales. Según el Partnership for Public Service, unos 900.000 empleados federales fueron suspendidos sin salario, y otros 700.000 continúan trabajando sin cobrar. Algunos estados permiten que estos trabajadores reciban beneficios por desempleo, pero una vez restablecido el financiamiento, deberán devolver esos pagos.

Si la Casa Blanca logra implementar su plan de despidos masivos, el desempleo podría aumentar de forma catastrófica. Pasar unos meses sin trabajo es un lujo inasumible para la mayoría de los estadounidenses — el 37% no tiene ahorros para cubrir gastos imprevistos de más de $500.

Los temores de que los aranceles vuelvan a impulsar la inflación han desaparecido temporalmente de la agenda. Sin embargo, la incertidumbre derivada de las amenazas arancelarias y del cierre del gobierno complica la toma de decisiones de la Fed: siete de los diecinueve miembros del FOMC no veían razones para reducir las tasas este año. No obstante, las previsiones a largo plazo (que hoy no se actualizarán) contemplan otro recorte antes de que termine el año.

Si se pone en duda la independencia de la Fed, la tasa de interés deja de ser un instrumento financiero para convertirse en un instrumento político — un símbolo de confianza en el modelo financiero estadounidense.

En realidad, la Fed ha dejado la puerta abierta en ambas direcciones — y el mercado lo ha notado.

Para Powell, mantener el equilibrio en su discurso es extremadamente difícil ahora. Cualquier paso en falso podría resultar en una pérdida de confianza del mercado.

Por un lado, una retórica moderada apoya a la economía; por otro, socava la confianza en la independencia de la Fed. El dólar y los bonos del Tesoro corren el riesgo de perder su papel como activos clave del sistema global.

Hoy, el mercado no espera señales claras de la Fed sobre el rumbo futuro de su política. Powell intentará mantener abiertas varias opciones de acción y no asumirá compromisos concretos hasta fin de año.

Así que actuamos con sensatez y evitamos riesgos innecesarios.

¡Buenos beneficios para todos!