Oro: el Gambito Americano

Suiza y su oro — un problema para el acuerdo con Trump

#XAUUSD

Zona clave: 3,330.00 - 3,380.00

Compra: 3,375.00 (tras un retroceso a 3,350); objetivo 3,550.00; StopLoss 3,300.00

Venta: 3,300.00 (sobre unos sólidos fundamentos negativos); objetivo 3,100.00; StopLoss 3,375.00

La magnitud de los nuevos aranceles de EE.UU. sobre todas las importaciones suizas fue un shock económico y diplomático. La decisión fue provocada por un pequeño sector que está en el centro del mercado mundial del oro. El Banco Nacional Suizo reiteró que las exportaciones excesivas de oro a EE.UU. no deben verse como un factor negativo para las relaciones comerciales bilaterales.

Recordemos:

Suiza es el mayor centro mundial de refinación de oro gracias a su reputación en calidad y confidencialidad. El metal precioso fluye constantemente hacia y desde el país, desde minas en América del Sur y África hacia bancos en Londres y Nueva York. Los lingotes de oro son el producto de exportación más caro de Suiza.

En Suiza hay solo cinco empresas que producen oro de inversión. Aunque el precio en bolsa supera los $3.500, estas empresas ganan apenas unos dólares por fundir un lingote. Sin embargo, estos flujos de oro causan fluctuaciones significativas en la balanza comercial suiza.

Trump quiere reducir el déficit comercial, pero las exportaciones récord de lingotes (más de $36 mil millones) representaron más del 60% del superávit comercial suizo con EE.UU. En el primer trimestre, el aumento del oro importado por EE.UU. se debió a la oportunidad de arbitraje transatlántico por temor a nuevos aranceles.

Para enviar oro a Nueva York, los traders europeos tuvieron que fundir lingotes de 400 onzas en Londres en formatos de 1 kg o 100 onzas, como exige la bolsa Comex. Esto convirtió a las refinerías suizas en un nodo clave del arbitraje.

Después de que el oro de inversión quedara exento de los aranceles de Trump, la mayoría de los lingotes “volvieron a casa” — el flujo neto de oro hacia Suiza superó los $1.000 millones, pero nadie tomó en cuenta esos detalles al establecer nuevos aranceles. Para EE.UU., la impresión del superávit comercial sigue siendo negativa.

Así que los expertos, diplomáticos y políticos suizos enfrentan una batalla difícil por una solución razonable.

El gráfico a largo plazo del oro sigue siendo optimista, pero en D1–W1 hay una clara sobrecompra. Para subir por encima de los $3.400 se necesita un catalizador político fuerte; para una reversión bajista, se requiere una ruptura de los $3.300. El interés de negociación está creciendo en ambos lados del mercado, pero tanto toros como osos carecen de argumentos suficientes.

Así que actuamos con sensatez y evitamos riesgos innecesarios.

¡Buenos beneficios para todos!